Por Lucas Bendayan
Ayer por la noche Argentina iba en busca de su séptima
dorada en futbol en panamericanos, recordando que la última conseguida había
sido en el 2003.
Llegaba con un solo gol en contra, recibido en el partido
contra Brasil, que concluyo en un empate. Y había ganado los otros partidos,
que lo llevaron a esta tan ansiada final con un hermoso estadio ubicado en
Guadalajara.
El partido, durante el primer tiempo fue parejo. El local
que manejaba la pelota y nuestro seleccionado mediante las contras o buenas
individualidades llegaba al arco rival.
El segundo periodo tuvo el único gol de encuentro, y el que
le dio la medalla dorada a México. El autor fue Jerónimo Amione.
Una de las claves de este triunfo fue por supuesto se local y
además que tenia jugadores con mas experiencia en cancha, como lo es el arquero
mundialista, que tiene 30 años.
A pesar de este segundo puesto, y creo que es digno tenerlo,
el equipo argentino se fue con la frente en alto, aunque sabían que era el
torneo revancha del Sudamericano que nos dejó afuera de Londres 2012.
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