lunes, 25 de abril de 2011

Sábado San Tomba

Por Guido Procu (@Procu7)

Atardeciendo estaba, y se sentía como latían los corazones de los hinchas que se acercaban al estadio.
En la mochila yo llevaba mi bandera nueva con el lema de "Colegiales" hecho a pintura.
Aunque no puede entrar con una bolsa repleta de papeles, y eso me trajo un poco de "bronca" hacia un año que no iba a esa cancha y la ultima vez, nos fuimos con un sabor amargo.
Soy de Buenos Aires, y mi corazón piensa semana por medio en Mendoza.
Arranca el partido y rapido me subi a un parabalanchas para ver el partido colgado, que hace un tiempo le agarre el gustito a subirme ahí y ver el partido en esa posición.
Del partido, recuerdo muchos momentos con el culo fruncido, es que literalmente nos tuvieron en un arco, la suerte, Mariano Donda y el barba, nos acompañaron. O sera que el muchacho Lamela, tiene menos definición que la sexualidad de Ricardo Fort.
En el entretiempo, con el marcador en nuestra contra, se murmuraban nombres entre los 7 u 8 centenares de hinchas que se acercaron al monumental (aunque esa noche lo unico monumental fue la victoria que nos llevamos), en mi mente solo pasaba un nombre, ese pelado que de manera tan lírica juega y agradable a los ojos es cuando entra. Ese que demuestra que el jogo bonito no solo lo tenia El "Mago" Ramirez. Estoy hablando de quien sino, Mariano Donda.
Parece que la defensa de River se olvido los botines en el vestuario. Soy irónico, claro, es que apenas comenzado el segundo tiempo, el Tomba igualaba los tantos. Poniendo una justicia que solo a los que somos hinchas del tomba nos parece justicia.
Ya había pasado 20 minutos y se sacaba la pechera Mariano, iba a entrar, en ese momento mi garganta enloquecía. y como una poesía, el Nº 31 entraría.
Llegando a los últimos 5 minutos de partido, una falta cerca del area, mostraba una de las pocas chances con las que iba a contar el expreso. En ese momento, mire al cielo y le pido al que esta allá arriba que esa jugada sea gol (sabiendo que el encargado de los tiros libre generalmente es el de cabeza rapada) y que nos ayude a ganar el partido. Luego de 1 minuto rezando, miro que un fierazo, se cuela en la red del arquero de selección, esa red que defendía el hijo de Amadeo.
Grite como pude, pero las lagrimas comenzaron a brotar de mis ojos y como un niño lloré.
Pasaban minutos y un poco de nerviosismo por que el partido no terminaba. hasta que el señor al que yo le grite bombero algunas veces ese partido, pito su silbato y esa tribuna, se volvió en descontrol absoluto.
Pensando ya en frió, no fue difícil notar que el partido podría haber tenido otros resultados, viendo que Paulo Ferrari se erró un gol en la linea, que Erik Lamela desperdicio una chance clara de gol, y varias oportunidades mas.
Esta vez, la suerte estuvo de nuestro lado.
Godoy Cruz quedo con 20 a uno de la punta y River tiene uno menos que su rival de turno, de este sábado que pasó.

1 comentario:

  1. che la verdad muy buena la nota, te felicito.
    Que dificil debe ser hincha de un equipo que esta a mil kilometros de tu casa.Igual cuando uno la va a ver debe ser lo mas lindo que te sucede en la vida, y mas ganado de esa manera en un monumantal casi repleto.

    ResponderEliminar