lunes, 6 de junio de 2011

Vamos a Volver. Quilmes 2-2 Boca Jrs.



Por Agustin Petrillo

Partido jugado en el Estadio Centenario, las dos hinchadas explotan, se asoma el capitán cervecero Danilo Gerlo por la puerta que conducirá al equipo a la cancha, sale el equipo y se desata la fiesta en la tribuna de Quilmes, la tribuna desplega un trapo que ocupa toda la popular, lluvia de serpentinas y papelitos. Luego de la salida de los de Falcioni por la manga, los jugadores toman sus posiciones y el árbitro Nestor Pitana pita el comienzo del partido.

Los primeros minutos fueron controlados por Boca, tanto por posesión como remates al arco, parecía que se llevaba por delante al Cervecero, el primer remate al arco fue de Pablo Mouche, tras un pase de Colazo. Luego de un corner, Caruzzo tuvo el primer grito en su pie derecho pero Tripodi le negó el gol. El juez de línea anulo mal un gol de Colazo ya que no estaba en offside y a los 27 minutos llega el primer tanto, tras un centro cruzado de Corvalan, mala coordinación entre Caruzzo y Luchetti y termina en gol en contra del central, 1-0. El segundo gol llego luego de un corner que había derivado de un remate de Romeo tapado por Luchetti (en offside), centro, mala salida del arquero y la pelota le quedo servida a Gerlo para poner el 2-0.

En el vestuario, Falcioni hiso ingresar al burrito Rivero por Erviti, un Erviti que no demostró ser el mismo de Banfield en los partidos que lleva jugados en Boca y que hiso gastar un gran monto de dinero al club de la Rivera. El segundo cambio que metió el DT fue “Tito” Noir por Colazo, y a los 17 minutos llego el Titan Martin Palermo para poner el gol del descuento con un bombazo desde casi 30 mts que hizo inútil la estirada de Tripodi, 1-2. 4 Minutos mas tarde, llego el empate otra vez desde afuera del área pero en esta ocasión el pochi Chavez tras una gran jugada. La victoria pudo ser para cualquiera de los dos, Quilmes en el ST solo llego con un Tiro Libre desde lejos de Sebastian Martinez que exigió al arquero de Boca. El silencio y la preocupación se apoderó de las almas de los hinchas cerveceros y cuando el arbitro dio por finalizado el partido las lagrimas de Caruso Lombardi lo decían todo, el milagro ya no podía ser realidad, ya no le quedan esperanzas a este Quilmes que parecía que había levantado cabeza pero se cayo en el final. A pesar de esto, Quilmes quedo muy bien parado gracias a las buenas actuaciones de este torneo y el equipo se va pero con la frente bien alta. Vamos a Volver.

No hay comentarios:

Publicar un comentario